Que seas feliz, ése es nuestro mayor interés. No nos interesa que seas religioso escolapio, o sacerdote, pero si Dios te llama, queremos ayudarle y acompañarte porque esa es la manera en la que serás feliz. Ya hace varios siglos le ocurrió a san José de Calasanz que, sin imaginarse que su vocación tuviese que ver con entregar su vida a los niños, se descubrió feliz entre ellos enseñándoles las ciencias y alimentando su fe; a gusto como en ningún otro lugar, y por eso dijo con valentía: “He encontrado en Roma la manera definitiva de servir a Dios, haciendo el bien a estos pequeños y no la dejaré por cosa alguna del mundo”
¿Y tú? ¿Has encontrado tu manera definitiva de ser feliz?